Los componentes estructurales de las baterías cumplen varias funciones importantes. Mantienen unidas las celdas y las protegen de golpes y vibraciones, por ejemplo, en caso de accidente.
Gracias a los plásticos, tanto el peso como los costes se mantienen bajos. Además, se pueden integrar soluciones para la gestión térmica y la ventilación, como la descarga de gas caliente, los filtros de partículas y la contención de la propagación térmica.